domingo, 27 de mayo de 2018

EL PUERTO Y EL 68



Con motivo del 50 aniversario de los acontecimientos que tuvieron lugar en Francia durante mayo de 1968, la Biblioteca Pública Municipal ha puesto en marcha una pequeña exposición sobre dicha época y su reflejo en España y en nuestra ciudad.

He de decir, ante todo, y aunque no resulte muy intelectual, que para mí 1968 supone un año extremadamente importante por dos circunstancias de carácter doméstico: en su transcurso se casaron mis padres y en su transcurso, casi al final, nací yo; dicho lo anterior recomiendo acercarse hasta la muestra, que permanecerá en la parte izquierda de la planta donde se encuentra la Biblioteca, antes de acceder a ella, hasta el 30 de junio.

Uno de los aspectos que más ha llamado mi atención es la referencia demográfica a El Puerto de Santa María de entonces, una ciudad de 35.000 habitantes (ahora ronda los 90.000) y, más aún, la constatación de que en esa población se registraba “una alta tasa de analfabetismo”, problema ya prácticamente desaparecido, lo que constituye uno de los ejemplos de las mejoras experimentadas desde entonces, logros que sólo pueden minusvalorarse desde una osada soberbia ignorante.

De entre los objetos que allí se concatenan me atrajo singularmente una máquina de escribir. Pocas cosas reflejan con tanta claridad y fidelidad los cambios vividos como la sustitución de la máquina de escribir por el ordenador. Lo que más mayor me ha hecho sentirme observando la recopilación confeccionada por la concejalía de Cultura ha sido el citado artefacto, su dignidad silenciosa, su aura de elegancia sobre el estricto utilitarismo, pues no en vano cincelé sobre sus teclas mis primeras pulsaciones adolescentes, cuando era la misma persona, y no la misma, según se analice, que soy ahora.

La iniciativa ofrece, como corresponde, libros significativos de aquel año, vídeos y fotografías, que los organizadores, detallistas, exhiben colgadas de aquellas cuerdas y pequeñas pinzas de revelado que la tecnología digital no enviara aún al desván de la memoria: arrollado por la digitalización, el Mayo del 68, tan vibrante como fue, parece revestirse a nuestras retinas de caracteres analógicos.

Francisco Lambea
Diario de Cádiz
27 de Mayo de 2018



domingo, 13 de mayo de 2018

CIUDAD DE CONTRASTES



Nada más difícil de desterrar que un tópico, que una idea preconcebida: el juicio se acomoda a la costumbre, menos trabajosa que el ansia de saber, de actualizarse, de ser consciente de que no todos los días han de amanecer, por ley natural, como espejos sucesivos. Eso pensaba mientras veía desplazarse por el hangar de Airbus el dron correspondiente al proyecto Arcow, una idea innovadora de transporte de logística ligera que permite reducir tiempos de producción con el consiguiente aumento de competitividad y facilidad de acceso a grandes paquetes de trabajo.

Aquel artefacto que acarreaba piezas de un punto a otro de la gigantesca nave con velocidad diabólica se movía sobre las cabezas curiosas de los  presentes al tiempo que yo, entre giro y giro, reflexionaba sobre cuán ajeno era su sofisticado vuelo para los prejuicios que desde fuera de Andalucía se tienen sobre nuestra tierra.

Igualmente discurría en torno a la cantidad de Puertos que hay dentro de El Puerto de Santa María, una ciudad más diversa de lo que no pocos portuenses estiman. Con frecuencia se me han venido a las mientes los contrastes entre la actividad náutica de Puerto Sherry, por ejemplo, y la cotidianidad terrenal del Barrio Alto. En el Molino de Mareas, detrás de la estación de tren, elabora sus ingenios gastronómicos Ángel León, uno de los grandes cocineros de nuestro país, que ha tenido el enorme mérito de erigir un restaurante, “Aponiente”, donde hace poco sólo transitaban los mosquitos dando vueltas como el dron, pero sin que nadie los mirara.

Muchos compatriotas desconocerán, de seguro, que la Bahía de Cádiz es uno de los territorios señeros en potencial aeronáutico de España. Provoca cierto enojo, aunque quizá esa ignorancia pueda comprenderse, observarse con mayor condescendencia, si se analiza que numerosos gaditanos coinciden en ella.

Uno de los iconos del progreso son los aviones: muchos aviones se construyen también aquí, muy cerca del papel que en estos momentos surca la retina del lector, muy próximos al ordenador desde el que atiende a esta columna. La realidad se presenta más rica y sorprendente de lo que a veces creemos.

Francisco Lambea
Diario de Cádiz
13 de Mayo de 2018